El pasado 19 de mayo se celebró en el salón de actos del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Madrid), la jornada principal de presentación de resultados del proyecto «CUBIWOOD – Descubriendo las cubiertas vegetales en cultivos leñosos», una iniciativa puesta en marcha por la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos, con el objetivo de impulsar las cubiertas vegetales como herramienta útil para gestión sostenible del suelo de cultivos como el viñedo, el olivar y los frutos secos, los tres sectores de leñosos con menor implantación de cubiertas vegetales.
Este proyecto cuenta con el apoyo financiero de la Fundación Biodiversidad y del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico y se estructura en trece líneas de actuación desarrolladas por un comité asesor de expertos entre los que se encuentra representación del Instituto de Ciencias de la Vid y del Vino (ICVV) a través de su investigador Sergio Ibáñez. Entre estas acciones, destacan la página web de CUBIWOOD (www.cubiwood.es), donde se recogen, entre otros aspectos, una amplia revisión bibliográfica sobre cubiertas en los cultivos señalados, un episodio del programa LA TIERRA Podcast y una guía práctica de manejo de las cubiertas vegetales en viñedo, olivar y frutos secos que fue presentada en la propia jornada, que constituye el documento clave y de referencia de este proyecto.
CUBIWOOD se ha desarrollado a nivel nacional en siete Comunidades Autónomas (Andalucía, Aragón, Castilla-La Mancha, Murcia, Extremadura, La Rioja y Madrid) y ha creado una red de veintitrés fincas experimentales y de ocho fincas demostrativas de agricultores. En su ámbito, se han celebrado también veinticinco jornadas formativas con agricultores y técnicos de UPA, una de las cuales tuvo lugar el 12 de mayo en la sede de UPA en Logroño y en la que el Dr. Sergio Ibáñez, del ICVV, impartió una ponencia sobre «Las cubiertas vegetales en el viñedo».
Según las conclusiones del proyecto, tras dos años de trabajo, las cubiertas vegetales aumentan el contenido de carbono del suelo, mejoran su estructura, disminuyen los gases de efecto invernadero, y reducen la erosión y la desertificación. También benefician a la biología de los suelos e incluso facilitan el acceso a las parcelas. Ahora bien, es necesario realizar una adecuada gestión de las mismas para obtener sus beneficios y no perjudicar a los cultivos, adaptándose a las condiciones de cada campaña, zona y cultivo. Para ello, es imprescindible potenciar la formación de los agricultores y el asesoramiento técnico, teniendo claro, según los participantes en el proyecto, que el objetivo de la cubierta nunca debe orientarse solamente hacia las ayudas de los eco-regímenes de la PAC.